miércoles, 23 de junio de 2010

Los extraños (The Strangers, 2008): Análisis de la película





Dir. Bryan Bertino
Int. Liv Tyler, Scott Speedman, Glenn Howerton
90 min. EE.UU.




Kristen McKay y James Hoyt deciden pasar una noche especial en la aislada segunda residencia de la familia Hoyt después de asistir a la boda de una amiga. Lo que iba a ser una velada especial se convierte en una pesadilla cuando reciben la visita de tres extraños con intenciones nada halagüeñas. Esta película está basada en los acontecimientos que tuvieron lugar en el 1801 de Clark Road, el 11 de febrero de 2005.

Permítanme que aproveche esta oportunidad para hablar sobre modas. Una moda bastante común es, por ejemplo, estrenarse en la dirección con una película de terror. Es como un bautismo de sangre… ¿cuántos directores han empezado haciendo thrillers o películas de terror para luego pasar a otros géneros? Me puedo imaginar claramente la escena… “¿quieres abrirte paso en el mundo del cine? Bueno, pues encárgate de alguna de terror y dependiendo del resultado ya veremos”.






En parte tiene sentido… el género de terror es presa fácil de incompetentes que piensan que sólo los adolescentes descerebrados disfrutan con este tipo de películas, por lo tanto… ¿para qué molestarse en currarse un buen guión? ¿Guión? ¿A quién le importa? Lo que importa es que haya algún actorcillo famoso… ya sea una Demi Moore, o un Johnny Depp, o una Liv Tyler, o una Nicole Kidman… eso da gancho… anda, miren ustedes por dónde, aquí tenemos otra moda… y, como es natural, debe haber sustos… sustos fáciles, por supuesto, sustos burdos y primitivos…

Y es que el género de terror ha sido y aún es muy frecuentemente denostado por la crítica… ¿qué importa que directores tan renombrados y prestigiosos como Ingmar Bergman, Roman Polanski o Carl Theodor Dreyer por citar sólo tres hayan realizado incursiones – maravillosas incursiones, todo hay que decirlo – en dicho género? Al fin y al cabo… ¿quién conoce a esos?, pensarán algunos. Generalmente los motivos que se esgrimen para vilipendiar tales películas es su apelación a los instintos más primarios del ser humano, a nuestro instinto de supervivencia, al miedo, a la dualidad eros / tanatos como eje central… hay tabúes que es mejor no explorar ni sobrepasar, y ése debería ser, precisamente, el cometido de una película de terror, la trasgresión, ir más allá de lo esperable, socavar conciencias, y por supuesto no caer en la autocomplacencia… es decir, que hacer una buena película de terror no es para nada fácil, pero cuando se consigue… ¡qué maravilla! Desgraciadamente, hoy día no existe mucha predisposición a ir al margen del cine mainstream, y la mayor parte de las películas de terror que nos llegan son bastante convencionales, manidas, carentes de originalidad y autocomplacientes.



Probablemente el hecho de haber visto tantas y tantas películas de terror me haya convertido en un tiquismiquis de esos que examinan con lupa todo lo que se estrena y están siempre propensos a la crítica por la crítica. Hasta cierto punto, es natural. Uno ha visto ya tanto, ha mamado tanto cine de género, que es lícito por su parte esperar algo más, algo nuevo, algo original, algo con un mínimo de decencia, de cada nueva película de terror que se estrena. Aún así, no importa cuántas decepciones me llevo cuando voy al cine a ver una de terror, siempre caigo y voy a ver la siguiente en ser estrenada. Masoquista que es uno. El caso es que, aunque el cine de hoy me lo ponga muy difícil, no soy de aquellos que siempre tienen la recurrente sentencia “el cine de terror de ahora es una mierda” detrás de la lengua, y que aprovechan cada estreno para echar por tierra todo lo que se hace hoy día simplemente por pertenecer al presente. Pero es que la paciencia de este sufrido espectador tiene límites, y bodrios como "Los Extraños" hacen que muchas veces me replantee mis criterios de selección de películas para ver en el cine.

Pero estábamos hablando de modas… recuerden, la moda de estrenarse con “una de terror”, o la de “recurrir a caras famosas como gancho”. Qué demonios importa si al director le apasiona realmente el género… bah… especialmente ahora, cuando existe esta otra moda (ya van tres) del terror supuestamente psicológico. Sí, ya saben, aquél carente de visceras y comedido en la medida de lo posible a la hora de mostrar sangre. ¿Gore? Eso es terror de segunda categoría, ya que el verdadero terror debe ser psicológico y ahondar en los miedos más profundos de la psique humana, arguyen algunos… Amenábar, sin ir más lejos, cuando se estrenó Los Otros, daba sus doctas impresiones al respecto a modo de cátedra, citando películas como Al Final de la Escalera como ejemplos de lo que debía ser el buen cine de terror.



Esta moda me divierte mucho. No soy un goremaníaco, en términos del crítico de cine Jesús Palacios, y hay cosillas que ni he visto ni creo que me interesen (ejemplos del ultragore alemán), la casquería por la casquería… sin embargo, tampoco comparto esos prejuicios que existen hoy día en contra del cine gore. Ya puestos, prefiero una película que me asquee o me provoque repulsión a una película que me aburra y me hunda en el tedio más absoluto. Por desgracia, el 90% de las películas de terror supuestamente psicológicas que se llevan estrenando en nuestras carteleras en los últimos años provocan en mí ese efecto.

Hacer terror psicológico no es fácil, saben. Hace falta talento, y por supuesto hace falta un guión excelente bien llevado por un director competente. Por desgracia esos ingredientes casi siempre brillan por su ausencia. Habrá críticos quienes valoren tales subproductos simple y llanamente por no ofender su exquisito sentido de la sensatez y buen gusto con altas dosis de sangre y casquería, pero para este sufrido espectador no hay nada peor, repito, no hay nada peor, que una película de terror pretenciosa, una película que pretenda sobrecogernos elegantemente sin conseguirlo. Por supuesto hay gente más o menos susceptible y asustadiza… pero si "Los Otros", por poner un ejemplo, es una gran película de terror entonces "Ace Ventura: Detective de Mascotas" es un glorioso exponente de la "screwball comedy". En fin, resumiendo, que ese prejuicio de no mostrar mucha sangre o gore porque el verdadero terror debe ser psicológico me parece una de tantas falacias esgrimidas por supuestos adalides del “auténtico cine de terror” (qué cojones sabrán ellos), y una muestra lamentable de estulticia de la que no estamos a salvo hoy día.



Pongamos como ejemplo el boom del j-terror o cine de terror japonés. Muchos opinan que el motivo por el que este cine ha sido y es tan popular es por recurrir a sustos inteligentes y atmósferas opresivas antes que en otra cosa. Bueno, permítanme que discrepe. Que "Ringu" es una obra maestra absoluta del terror es algo de lo que no me cabe la menor duda (otra gallo cantaría con la plúmbea versión americana)… como también me lo parecen "Tetsuo" y "Audition", por citar dos ejemplos más… eso sí… "The Grudge", "Dark Water", con sus secuelas y remakes, me parecen truños infumables, y rara es la película oriental, exceptuando las ya citadas, y estrenada en los últimos años, que haya provocado en mí la más mínima sensación de inquietud o malestar. Todo lo contrario, lo que han demostrado es que son efectivos remedios alternativos contra el insomnio.

Pero sigamos con las modas, que de eso es lo que va este artículo/reseña, ¿no? Otra moda tristemente común en el cine de terror de ahora, pero que curiosamente no es nada novedosa en la historia del género, es el hecho de estar inspirado en hechos reales. Ya se sabe, no es lo mismo una película de terror “sin” la famosa etiquetita que otra “con” dicha etiquetita. Es como si la inclusión de la misma sirviera de recurso para meter más al espectador en la historia y conseguir que se sobrecoja más fácilmente con las truculencias mostradas o sugeridas en pantalla… al fin y al cabo, si una película está inspirada en hechos reales eso significa que nos podría pasar a todos, ¿no? Y voilà! La inclusión de dicha coletilla es garantía probada de que el espectador medio lo pasará peor en el cine.



La verdad es que hay tanta saturación de películas de terror “basadas en hechos reales” que, en mi caso concreto, su inclusión juega ya más en su contra que a su favor, en tanto en cuanto ha terminado convirtiéndose en un recurso narrativo más, es otra moda, otro cliché… y en mi caso concreto sólo porque se inspire en hechos reales no implica que lo vaya a pasar peor o mejor… no, señores guionistas… si ustedes desean conseguir que un servidor lo pase mal en el cine (aunque uno ya se plantea si está pidiendo demasiado… ¡pasarlo mal viendo una película de miedo! Mira que soy exigente…) tendrán que currárselo un poco más.

Bueno, y a todo esto, se supone que estoy escribiendo una reseña de "Los Extraños"… y en realidad no he hecho otra cosa desde que comencé mi comentario sobre las modas… "Los Extraños" es otro subproducto de director novel, basado en hechos reales, y con ausencia prácticamente total de sangre, violencia, gore y situaciones impactantes o escalofriantes resueltas con un mínimo de eficacia y decencia, suplido todo ello con altas dosis de estupidez, sopor y hastío… como ven, nada nuevo.

Poco puedo comentar del guión, porque es insultante en su esquemática simplicidad. Una historia que no habría dado ni para un corto de 20 minutos se extiende, y se extiende, y se extiende… hasta los 90 minutos de rigor. ¿Cuál es el gancho de la historia? Bueno… está inspirado en hechos reales… aparte de eso, es la típica historia de inocentes víctimas siendo acosadas por unos individuos con malas intenciones… si puede ser con la cara cubierta, pues mejor, ya se sabe, a lo mejor hasta consiguen añadir otro icono a la abundante cantera de psychokillers enmascarados del cine de terror. Y si la máscara no refleja monstruos o seres deformes, sino caritas dulces de niña, muñeca o payaso… pues tanto mejor, así se consigue un efecto subversivo de lo más “molón”…



Las víctimas del “terror” en este tipo de subproductos suelen enmarcarse en dos grupos: la caterva imbécil de adolescentes clónicos y la sufrida pareja que ha pasado o está pasando por un trauma o un bache emocional en sus vidas. En el caso de "Los Extraños", el protagonista declara su amor a la chica al principio de la película y ésta lo rechaza… trauma al canto… ella se siente después culpable… lo cual implica una mayor fragilidad emocional… y ¡chas! Aquí aparecen los malos de turno para castigar su insolencia y hacerla sufrir… o al menos en teoría, porque entre tanta memez el que termina sufriendo aquí es el espectador. A nivel interpretativo, como es natural, poco se puede esperar de Tyler o Speedman… son un reclamo principalmente físico… chico guapo para ellas, y chica guapa para ellos. Ya tenemos el cebo. Es una lástima que los dos protagonistas se pasen casi todo el metraje de la película saliendo de y volviendo a entrar en la casa sin que pase absolutamente nada.

Los extraños enmascarados del marras, por su parte, se limitan a aparecer y desaparecer en plan Batman, a lo “hago ‘chás’, y aparezco a tu lado”, sin hacer apenas nada que consiga suscitar el más mínimo interés. Cuando finalmente deciden hacer algo, ya ha pasado más de una hora, y uno se pregunta, con bastante mala leche, por qué ha sido necesario esperar tanto para ver, al fin, algo… pero claro, nuevamente, es un largometraje y debe hacer honor a su condición, aunque eso implique alargar absurdamente escenas y postergar ad eternum el clímax, clímax que al final deja de resultar climático por lo poco novedoso y arriesgado que es… cuando uno llega al final de la película no puede por menos que preguntarse… bueno, ¿y todo el coñazo que me he tragado… para esta mierda de final? Pues algo así.



En resumidas cuentas, "Los Extraños" es un ejemplo prototípico de ese cine de pseudo-terror tan común hoy día, cine de correcta factura, caras guapas y conocidas, sustos fáciles sustentados en golpes de efecto para niños de párvulo y estruendo sonoro y un guión raquítico que se limita a acumular clichés vistos hasta la saciedad. ¿Por qué hacer este bodrio entonces? Bueno, supongo que porque el terror sigue teniendo tirón, muy especialmente entre la población adolescente, lo cual es, por un lado, algo positivo (quizás sin ese público potencial se invertiría mucho menos en este tipo de cine) y por otro algo negativo (autocomplacencia, falta de originalidad e inteligencia). Supongo que habrá también incluso quienes consideren que esta película es realmente aterradora y cruel (¡y es que realmente hay críticos a los que les escandalizan estas películas y consideran que engendros como "Los Extraños" son terroríficas, sádicas y crueles!). Para el que esto escribe, "Los Extraños" es un amago de película a evitar a toda costa.

Y lo más triste de todo es que, mientras esta basura siempre encuentra el medio de colarse en nuestras carteleras con bastante celeridad, otras películas más antiguas como la magnífica "À L’Interieur" aún no lo han hecho, y ni siquiera existe la certeza de que así vaya a ser. Hablando de "À L’Interieur", película del 2007 con la que "Los Extraños" guarda ciertas similitudes narrativas (víctima/s inocente/s amenazada y acosada por una presencia siniestra en el interior de su domicilio)… he aquí un buen ejemplo de lo que debería ser una buena película de terror: brutal y cruel (esta vez sí), impactante, sangrienta y a la vez con una magnífica atmósfera (sustentada muy en parte en su estupenda banda sonora)… ah, y sin caras conocidas… y sin la coletilla de “basada en hechos reales”… y aún así, mira tú por dónde, esta película sí que es realmente aterradora… que, al fin y al cabo, es de lo que se trata, ¿no?


Calificación de la película: * sobre *****

4 comentarios:

  1. Leí muchas malas impresiones sobre la película y no la vi hasta que la encontré en hbo go online, en lo personal me ha parecido muy buena tiene una historia atractiva y que te mantiene en suspenso.

    ResponderEliminar
  2. Escuche bastantes críticas acerca de esta película así que me animé a verla y aunque me aterran este tipo de historias la verdad es que me gustó mucho, es una mezcla correcta de suspenso y terror una excelente adaptación de un historia real. Tuve la oportunidad de verla a través de Hbo go online y en general puedo decir que es una película que volvería a ver con todo y que los filmes de terror no son mis favoritos.

    ResponderEliminar
  3. Totalmente de acuerdo con la crítica, malísima

    ResponderEliminar
  4. Totalmente de acuerdo con la crítica, es malísima

    ResponderEliminar