La principal diferencia entre esta película y la anterior versión de
1995 es que, mientras que aquélla era una película de Sylvester
Stallone, ésta es una película de Dredd... que, al fin y al cabo, es de lo que se trata, ¿no? Lo que se pierde en efectos
especiales y presupuesto se gana en autenticidad y respeto por el
material original de John Wagner y Carlos Ezquerra, sin que los egos
personales interfieran en la plasmación final del universo y los
personajes que pueblan este célebre cómic británico.
Podrá parecer una tontería, pero en ese sentido es sumamente significativo el
hecho de que en esta nueva película el protagonista, interpretado
magníficamente por Karl Urban, no se quite el casco en ningún momento,
respetando en ese sentido la esencia del personaje. Si no lo hace en el
cómic, ¿por qué iba a hacerlo durante buena parte del metraje de la
película de los 90? Pues claro, porque la protagonizaba una gran
estrella de Hollywood, y... ¿para qué pagar a una estrella como Stallone
si va a estar casi toda la película con el casco puesto y no se le va a
poder ver el rostro?. Cuestión de egos, como ya se ha apuntado en el anterior párrafo. Karl Urban no tiene
el tirón ni la trayectoria de Sly, indudablemente, pero es precisamente por
eso no hay necesidad alguna de mostrar su rostro todo el rato pudiendo,
de este modo, permanecer en el "anonimato" durante todo el metraje de la
película.
Por otro lado, la anterior adaptación decepcionaba también a la hora de plasmar ese universo descarnado, brutal y violento por el que se mueve el protagonista en los cómics. Al fin y al cabo, era una "gran" superproducción a la mayor gloria de su estrella protagonista, por lo que tampoco podían permitirse una película de una violencia excesivamente gráfica que pudiera perjudicarla a la hora de promocionarla en los cines. Por el contrario, esta nueva adaptación es una película mucho más modesta, filmada con menor presupuesto, y rodada en escenarios como Sudáfrica, suponemos que para abaratar costes. Gracias a eso, han podido permitirse mayores licencias a la hora de mostrar la violencia de los cómics sin tantos remilgos como la anterior. En ese otro sentido, esta nueva aportación al personaje es también una película más fiel al referente que adaptan (como pasara igualmente con "Punisher: War Zone" del 2008, la más fiel y modesta adaptación del personaje de la Marvel de todas las que se han hecho hasta el momento).
Y es que, si se quiere hacer una película de este tipo dirigida más a un público adulto, resulta necesario abaratar los costes de producción, dado que, cuanto menores sean los costes, mayor será la libertad de la que se dispondrá a la hora de respetar el tono adulto del material original. No es sorprendente, por tanto, que el propio John Wagner se refiriera a esta película en los siguientes términos: "Esto es Dredd como debería haberse hecho: fiel al personaje, visceral y brutalmente violenta". Sí, claro, las limitaciones de presupuesto condicionan sobremanera la historia, sin embargo el filme de Pete Travis hace de la necesidad virtud y no se complica con grandes decorados ni innecesarios alardes de CGI. La película es austera, pero esa austeridad jamás se percibe como una limitación, sino más bien como una necesidad e incluso una exigencia del guion, de modo que la película luce maravillosamente bien a pesar de su reducido presupuesto, aprovechando esa austeridad incluso para aportar a los decorados un tono feísta, grisáceo, sucio, que beneficia muchísimo la historia y que no desentona en absoluto con el universo del juez Dredd. Esta película es un perfecto ejemplo de que no es necesario gastarse muchos millones para que una película luzca bien y resulte entretenida, apostando por una sobriedad de recursos que les permite además una mayor libertad artística y un mayor respeto, como ya se ha apuntado anteriormente, hacia el cómic en el que se inspira.
Por si todo esto no fuera suficiente, "Dredd" da asimismo un ejemplo de contención en su duración, 95 minutos en los que nada sobra y nada falta, y en donde no encontramos puntos muertos. La película va al grano desde su mismo arranque, sin perderse en innecesarias perífrasis narrativas, y el ritmo no decae en ningún momento.
En el apartado interpretativo, ya se ha destacado cuán acertada fue la elección de Karl Urban para interpretar al personaje protagonista, sin embargo merece también una atención especial una estupenda Lena Headey en el papel de la villana Ma-Ma, uno de los mejores y más memorables personajes de la película, tanto es así que su presencia en la película sabe a poco y nos deja con ganas de saber más sobre ella. Ma-Ma viene por tanto a cubrir una inexplicable carencia de villanos femeninos en este tipo de películas de acción, por lo que esperamos que cunda el ejemplo y no tardemos mucho tiempo en volver a encontrarnos con personajes como ella como la antítesis del héroe (o heroína) de turno.
Y qué podemos decir de la extraordinaria banda sonora firmada por Paul Leonard-Morgan: da a la película lo que ésta necesita, contribuyendo sobremanera en la descripción de ese universo distópico, industrial y sucio por el que se mueve el protagonista. Es de agradecer, muy de agradecer, que cada vez sean más los directores que apuestan por otros compositores distintos, procedentes de backgrounds musicales diferentes a los que nos tiene acostumbrados Hollywood, y que no tienen reparos a la hora de utilizar la electrónica como vehículo principal de expresión en este tipo de proyectos. Sinceramente, no me imagino el mundo de Dredd con otra música: descarnada, no siempre agradable (ni falta que le hace), rítmica y agresiva por momentos, con un punto "ambient", etéreo y onírico para ilustrar aquellos momentos en los que algún personaje se encuentra bajo los efectos de la droga "slo-mo".
El resultado raya la perfección, contribuyendo a generar la sensación de que el tiempo se ha congelado en esos instantes (que, a la postre, son también los más destacables desde un punto de vista visual... atención por ejemplo a la escena en la que se ve a Ma-Ma tomando un baño y alzando "ráfagas" de agua al aire, las cuales parecen congelarse, adoptando las formas más caprichosas en la que constituye una de las secuencias más visualmente impresionantes de todo el filme). Paul Leonard-Morgan le da al film de Travis, en definitiva, el enfoque musical que esta película requiere, con unos resultados excepcionales. Sin lugar a dudas, me parece una de las mejores bandas sonoras de lo que va de año.
Mención aparte merece, por supuesto, el también idóneo uso del estupendo "Skream Remix" del tema "In for the Kill" de La Roux utilizado en el trailer de la película:
En resumidas cuentas, por todos estos motivos, "Dredd" no es sólo una de las mejores (y más respetuosas) adaptaciones de cómic que haya visto en mucho tiempo, sino también una de las mejores y más entretenidas películas de acción del año. Todo un acotencimiento que merece ser visto, en toda su grandeza, en una sala de cine. En otras palabras: ¡PE-LI-CU-LÓN!
Calificación de la película: **** sobre *****
Por otro lado, la anterior adaptación decepcionaba también a la hora de plasmar ese universo descarnado, brutal y violento por el que se mueve el protagonista en los cómics. Al fin y al cabo, era una "gran" superproducción a la mayor gloria de su estrella protagonista, por lo que tampoco podían permitirse una película de una violencia excesivamente gráfica que pudiera perjudicarla a la hora de promocionarla en los cines. Por el contrario, esta nueva adaptación es una película mucho más modesta, filmada con menor presupuesto, y rodada en escenarios como Sudáfrica, suponemos que para abaratar costes. Gracias a eso, han podido permitirse mayores licencias a la hora de mostrar la violencia de los cómics sin tantos remilgos como la anterior. En ese otro sentido, esta nueva aportación al personaje es también una película más fiel al referente que adaptan (como pasara igualmente con "Punisher: War Zone" del 2008, la más fiel y modesta adaptación del personaje de la Marvel de todas las que se han hecho hasta el momento).
Y es que, si se quiere hacer una película de este tipo dirigida más a un público adulto, resulta necesario abaratar los costes de producción, dado que, cuanto menores sean los costes, mayor será la libertad de la que se dispondrá a la hora de respetar el tono adulto del material original. No es sorprendente, por tanto, que el propio John Wagner se refiriera a esta película en los siguientes términos: "Esto es Dredd como debería haberse hecho: fiel al personaje, visceral y brutalmente violenta". Sí, claro, las limitaciones de presupuesto condicionan sobremanera la historia, sin embargo el filme de Pete Travis hace de la necesidad virtud y no se complica con grandes decorados ni innecesarios alardes de CGI. La película es austera, pero esa austeridad jamás se percibe como una limitación, sino más bien como una necesidad e incluso una exigencia del guion, de modo que la película luce maravillosamente bien a pesar de su reducido presupuesto, aprovechando esa austeridad incluso para aportar a los decorados un tono feísta, grisáceo, sucio, que beneficia muchísimo la historia y que no desentona en absoluto con el universo del juez Dredd. Esta película es un perfecto ejemplo de que no es necesario gastarse muchos millones para que una película luzca bien y resulte entretenida, apostando por una sobriedad de recursos que les permite además una mayor libertad artística y un mayor respeto, como ya se ha apuntado anteriormente, hacia el cómic en el que se inspira.
Por si todo esto no fuera suficiente, "Dredd" da asimismo un ejemplo de contención en su duración, 95 minutos en los que nada sobra y nada falta, y en donde no encontramos puntos muertos. La película va al grano desde su mismo arranque, sin perderse en innecesarias perífrasis narrativas, y el ritmo no decae en ningún momento.
En el apartado interpretativo, ya se ha destacado cuán acertada fue la elección de Karl Urban para interpretar al personaje protagonista, sin embargo merece también una atención especial una estupenda Lena Headey en el papel de la villana Ma-Ma, uno de los mejores y más memorables personajes de la película, tanto es así que su presencia en la película sabe a poco y nos deja con ganas de saber más sobre ella. Ma-Ma viene por tanto a cubrir una inexplicable carencia de villanos femeninos en este tipo de películas de acción, por lo que esperamos que cunda el ejemplo y no tardemos mucho tiempo en volver a encontrarnos con personajes como ella como la antítesis del héroe (o heroína) de turno.
Y qué podemos decir de la extraordinaria banda sonora firmada por Paul Leonard-Morgan: da a la película lo que ésta necesita, contribuyendo sobremanera en la descripción de ese universo distópico, industrial y sucio por el que se mueve el protagonista. Es de agradecer, muy de agradecer, que cada vez sean más los directores que apuestan por otros compositores distintos, procedentes de backgrounds musicales diferentes a los que nos tiene acostumbrados Hollywood, y que no tienen reparos a la hora de utilizar la electrónica como vehículo principal de expresión en este tipo de proyectos. Sinceramente, no me imagino el mundo de Dredd con otra música: descarnada, no siempre agradable (ni falta que le hace), rítmica y agresiva por momentos, con un punto "ambient", etéreo y onírico para ilustrar aquellos momentos en los que algún personaje se encuentra bajo los efectos de la droga "slo-mo".
El resultado raya la perfección, contribuyendo a generar la sensación de que el tiempo se ha congelado en esos instantes (que, a la postre, son también los más destacables desde un punto de vista visual... atención por ejemplo a la escena en la que se ve a Ma-Ma tomando un baño y alzando "ráfagas" de agua al aire, las cuales parecen congelarse, adoptando las formas más caprichosas en la que constituye una de las secuencias más visualmente impresionantes de todo el filme). Paul Leonard-Morgan le da al film de Travis, en definitiva, el enfoque musical que esta película requiere, con unos resultados excepcionales. Sin lugar a dudas, me parece una de las mejores bandas sonoras de lo que va de año.
Mención aparte merece, por supuesto, el también idóneo uso del estupendo "Skream Remix" del tema "In for the Kill" de La Roux utilizado en el trailer de la película:
En resumidas cuentas, por todos estos motivos, "Dredd" no es sólo una de las mejores (y más respetuosas) adaptaciones de cómic que haya visto en mucho tiempo, sino también una de las mejores y más entretenidas películas de acción del año. Todo un acotencimiento que merece ser visto, en toda su grandeza, en una sala de cine. En otras palabras: ¡PE-LI-CU-LÓN!
Calificación de la película: **** sobre *****
Saludos
ResponderEliminarMe resulta exitista la crítica. La película en ningún caso está mala, pero en ningún caso ronda el éxito que planteas. El presupuesto utilizado (50 millones de dolares) si me resulta excesivo para los logros entregados, y lo peor es que no logra acaparar audiencia como para asegurar la prometida trilogía, por lo cual si se hace exagerado utilizar ese dinero, con promesas de ampliar un éxito que no se logra.
Ahora ben, las actuaciones son buenas, pero no excelentes. La villana se agradece y resulta ser un logro, pero más nada.
Claramente una película recomendable para quién disfrute de la sangre exagerada, pero no más.
Saludos
ResponderEliminarNo entiendo lo que quieres decir con "exitista", Claudio, y tampoco aparece recogido en el RAE.
Independientemente de lo recaudado en taquilla, la película me parece un éxito como adaptación del cómic, en tanto que respeta el tono y el espíritu original del cómic, y lo hace ofreciendo una de las mejores películas de acción del año.
Las actuaciones son todo lo que una película como ésta necesita. Hablamos de "Dredd", no de "Scarface". No hay necesidad de grandes alardes interpretativos, aunque todos los actores cumplen con creces su cometido en este apartado.
Por lo demás, y como siempre suelo decir, sobre gustos no hay nada escrito. ;-)
Saludos Men
EliminarPrimero que todo gracias por darte el tiempo de responder.
Me refiero a exitista, en el sentido de ampliar los logros de la película (es una palabra bastante usada en Chile). A mi parecer o que planteas promete mas de lo que la película ofrece, pero como muy bien dice en gustos no hay nada escrito.
Mi comentario no busca agredir tu espacio virtual, muy por el contrario la idea es poder presentarte este otro parecer. Por lo cual insisto en agradecerte tu respuesta.
Un abrazo y seguiré mirando tus post...
Saludos
ResponderEliminarNo hay de qué. Gracias a ti por dejar tu feedback y compartir tu punto de vista. Es algo que siempre enriquece. ;-)
Otro abrazo para ti, y gracias de nuevo